Durante el verano, muchas personas no utilizan sus chimeneas porque las altas temperaturas hacen que se conviertan en un objeto innecesario. Sin embargo, al dejar las chimeneas sin protección, se corre el riesgo de que entren insectos, aves y otros animales a través de la abertura y causen daños en el interior de la casa.
Además, la exposición a la intemperie puede desgastar las piezas de la chimenea y obstaculizar su correcto funcionamiento cuando llegue el invierno.
Por eso, tapar la chimenea durante el verano no solo es una medida preventiva, sino que también puede prolongar la vida útil del sistema de calefacción de la casa.
En este artículo te explicamos los beneficios de tapar tu chimenea durante el verano y las diferentes opciones de cierre que puedes aplicar.
¿La chimenea calienta más con la puerta abierta o cerrada?
En términos generales, una chimenea cerrada proporciona una mayor eficiencia en la emisión de calor que una abierta.
Aunque la cantidad de aire que entra en el hogar puede disminuir, el calor generado es más uniforme y suave, permitiendo un mayor ahorro de combustible y una sensación térmica más agradable en el ambiente.
Se recomienda utilizar chimeneas cerradas para una calefacción más eficiente y sostenible. Además, en verano es conveniente taparla.
¿Qué se puede colocar delante de una chimenea?
Para darle vida y luminosidad a una chimenea, se pueden colocar elementos decorativos como velas, detalles de fibra o cristal, y toques de verde y flores.
Los colores rosados, blancos, verdes y arenas son ideales para aportar suavidad y contraste frente al tono oscuro de la chimenea cuando está apagada. De esta manera se consigue una decoración equilibrada y acogedora en cualquier espacio.
Cómo proteger tu hogar de la entrada de insectos durante el verano tapando la chimenea
Durante el verano es común que los insectos intenten entrar a nuestro hogar en busca de refugio y comida. Una forma efectiva de evitar su entrada es tapando la chimenea.
Los insectos utilizan las chimeneas como un conducto para ingresar a nuestro hogar ya que es un espacio sin obstáculos y amplio. Cerrarla con una malla metálica o un tapón especializado es una manera sencilla y económica de prevenir su ingreso.
Además de proteger tu hogar de los insectos, esta medida también ayuda a reducir los riesgos de incendios en el hogar.
Ahorro energético en verano: cómo tapar la chimenea para reducir el consumo del aire acondicionado.
En verano, el aire acondicionado se convierte en uno de los principales consumidores de energía eléctrica en los hogares. Sin embargo, una forma sencilla de reducir su consumo es tapar la chimenea.
Aunque parezca contradictorio, la chimenea actúa como un conducto de aire caliente que dificulta la circulación del aire fresco. Para solucionarlo, basta con bloquear la chimenea con alguna tapa o material aislante.
De esta manera, se reducirá la entrada de aire caliente al hogar y, por tanto, el esfuerzo y consumo del aire acondicionado.
Tapar la chimenea en verano es una medida preventiva que puede traer muchos beneficios en términos de seguridad, comodidad y ahorro energético.
Es importante recordar que, incluso en los meses más calurosos, nuestra casa sigue siendo vulnerable a peligros como incendios y filtraciones de aire indeseadas.
Al cerrar adecuadamente la chimenea, estamos protegiendo nuestro hogar y reduciendo los costos de la factura de energía al prevenir la entrada de aire caliente y la salida de aire acondicionado.
Por lo tanto, tapar la chimenea en verano es una práctica recomendada para cualquier propietario que quiera cuidar de su casa y de su bolsillo.