Organizar la nevera
Comprar un frigorífico es un gran negocio. Si te equivocas, tendrás que vivir con él durante años, incluso una década o más. Pero no te asustes. Aunque no se compra un electrodoméstico grande todos los días, un poco de planificación previa ayuda mucho.
Cómo elegir frigorífico
Comprar un frigorífico es un gran negocio. Si te equivocas, tendrás que vivir con él durante años, incluso una década o más. Pero no te asustes. Aunque no se compra un electrodoméstico grande todos los días, un poco de planificación previa ayuda mucho.
No es de extrañar que haya muchas trampas que evitar. En la lista hay cosas que hay que tener en cuenta antes de entrar en la tienda o pulsar el botón de compra. Una es elegir el estilo y el acabado equivocados para la decoración de tu casa. Otro es no pensar en la capacidad y las necesidades de almacenamiento de alimentos. Y preocuparse por los detalles también es importante.
No es divertido vivir con cajones interiores malhumorados. ¿Hay compartimentos para embutidos, quesos, lácteos? Tal vez no te importe, pero al menos compruébalo antes de comprometerte. Extras como máquinas de hielo, dispensadores de agua y jarras de agua automáticas que usarás a diario pueden marcar una gran diferencia, e incluso las cámaras y la inteligencia también son factores clave.
Y algo que es una característica imprescindible para otra persona podría ser un desperdicio de dinero para usted, por lo que entender lo que está pagando es importante.
Organizar frigoríficos
Saber en qué parte del frigorífico guardar los alimentos es una pregunta para la que mucha gente desearía conocer la respuesta. Refrigerar los alimentos correctamente es importante para garantizar su seguridad y evitar la propagación de bacterias nocivas en los alimentos crudos y listos para el consumo.
Los alimentos listos para el consumo, como los productos lácteos, los platos preparados y los alimentos envasados, las sobras, las carnes cocinadas y las ensaladas preparadas. Todos ellos deben cubrirse o guardarse en recipientes herméticos para evitar la contaminación. Los alimentos listos para el consumo se almacenan en la parte superior del frigorífico, lejos de los alimentos crudos, para que las bacterias nocivas no puedan transferirse de los alimentos crudos a los cocinados.
La carne, las aves y el pescado crudos se guardan en recipientes herméticos para evitar que entren en contacto con otros alimentos o goteen sobre ellos. Las carnes crudas deben guardarse siempre en la parte inferior del frigorífico para evitar la contaminación cruzada. Asegúrate de que cada artículo está envuelto o en un recipiente sellado para que no entre en contacto con otros alimentos.
Frutas, verduras y hortalizas lavadas antes de guardarlas. Asegúrese de que su fruta, verdura y ensalada están envueltas en papel o plástico con orificios de ventilación para mantenerlas protegidas de cualquier contaminación. En el caso de las ensaladas y las hierbas aromáticas, prueba a envolverlas en una toalla de papel húmeda antes de guardarlas para evitar que se sequen y mantenerlas frescas durante más tiempo.