Ideas para guardar mantas de sofá
Hay muchas formas de guardar las mantas del sofá:
- Baúles o cestas: si tienes espacio suficiente, los baúles o cestas pueden ser una opción muy práctica para almacenar tus mantas de sofá. Además de mantenerlas alejadas de la vista, podrás acceder a ellas fácilmente cuando las necesites.
- En el sofá: si no te molesta tener tus mantas a la vista, puedes optar por guardarlas directamente en el sofá. Una opción es doblarlas con cuidado y colocarlas en uno de los brazos del sofá o en el respaldo. De esta manera, tendrás tus mantas a mano para cuando las necesites.
- Armarios o estanterías: si prefieres mantener tus mantas fuera de la vista, puedes guardarlas en armarios o estanterías. Asegúrate de doblarlas correctamente para evitar arrugas y colocarlas en una caja o bolsa para protegerlas del polvo.
- En el pie de cama: si tienes una cama con espacio debajo, puedes guardar tus mantas en el pie de la cama. Además de mantenerlas alejadas de la vista, también tendrás fácil acceso a ellas cuando quieras usarlas.
- Colgadas en una escalera: si quieres dar un toque decorativo a tu hogar, puedes colgar tus mantas en una escalera. Además de mantenerlas organizadas, podrás utilizarlas como elemento decorativo en la estancia.
En definitiva, hay muchas opciones para guardar tus mantas de sofá. Lo importante es encontrar la opción que mejor se adapte a tus necesidades y estilo de vida.
Ideas para guardar mantas y edredones
Perfectas para acurrucarse en el sofá o como manta extra en la cama, las mantas son elegantes y versátiles en cualquier habitación. Pero cuando bajan las temperaturas y salen las mantas, ¿cuál es la mejor manera de guardarlas?
Ningún salón está completo sin unas cuantas mantas. Las siestas vespertinas en el sofá mejoran con mantas de felpa. ¿Y las largas maratones de cine? Son más especiales cuando te acurrucas con una manta gruesa.
Cuando se trata de guardar mantas, las cestas bonitas son tus amigas. Me encanta enrollar las mantas y colocarlas en grandes cestas de tela. Las cestas tejidas son elegantes y clásicas, pero cualquier tipo de cesta bonita puede servir.
Convierte tus mantas en decoración de pared colgándolas de ganchos. Este enfoque inesperado funciona en cualquier pared desnuda, y es una gran manera de mostrar los colores, patrones y texturas de tus mantas de temporada.
Ideas para guardar mantas de sofá en espacios reducidos
Si el problema es el espacio (no todos vivimos en mansiones), aquí te dejo unas cuantas ideas para guardar tus mantas de sofá:
- Bolsas de almacenamiento al vacío: si tienes un espacio muy limitado, una buena opción puede ser utilizar bolsas de almacenamiento al vacío para guardar tus mantas de sofá. Estas bolsas te permiten comprimir tus mantas al máximo, reduciendo significativamente su volumen y facilitando su almacenamiento.
- Cajas apilables: si tienes un armario o estantería estrecha, puedes optar por utilizar cajas apilables para guardar tus mantas de sofá. Elige cajas con tapa para proteger tus mantas del polvo y apílalas una encima de otra para aprovechar al máximo el espacio disponible.
- Colgadas detrás de una puerta: otra opción práctica es utilizar ganchos o perchas para colgar tus mantas detrás de una puerta. Este espacio suele estar desaprovechado y es perfecto para guardar mantas sin ocupar demasiado espacio.
- En cestas colgadas en la pared: si te gusta el estilo rústico o bohemio, puedes utilizar cestas de mimbre colgadas en la pared para almacenar tus mantas de sofá. Además de ser una opción práctica, añadirás un toque decorativo a la estancia.
- Debajo del sofá: si tienes un sofá con espacio debajo, puedes aprovecharlo para guardar tus mantas de sofá. Utiliza cajas apilables o bolsas de almacenamiento al vacío para mantener tus mantas protegidas y aprovecha el espacio disponible.
En conclusión, aunque tengas un espacio reducido, existen muchas opciones para guardar tus mantas de sofá de manera organizada y protegerlas del polvo. Utiliza la creatividad para aprovechar al máximo el espacio disponible en tu hogar.
